Una Roca llamada No

Oye mira, mírame bien, pesas, estas muy pesado, tus miedos corren como ríos en tus palabras, tanta rabia en una simple frase, el tiempo no te calma, solo te hace ver que la herida abierta aun duele, sabes, yo pienso en ti, no tanto como tu crees, menos de lo que debería y mas de lo que temo, tu corazón es una bandeja de la cual no espero llevarme mucho, mas bien deseo poner algo, hay un jardín marchito de desolación que se pudre en tu pasado, y ahora sobre quien pretendes drenar el descompuesto sistema emocional que hoy te limita, que desde ayer paso de empalizadas a murallas de piedra, no vengo con cinceles ni dinamita a destruir el recinto en el que tanto guardas lo que aun te queda de ti, solo quiero que tu quieras querer un poco mas de lo que enterraste como muerto y que ahora tiene raíces, si supieras que desde esta ventana llamada pupila te ves brillar. Quien paso y dejo esas estampidas aun no ha salido, lo escuchas aun, lo ves en mi, lo besas al besarme, golpea el suelo y esta buscando algo que ahora ambos han perdido, no se puede negar que tus palabras son tan asperas como dulces son tus caricias, y entre tanta contradicción que le dice tu piel a la mía a mis oídos parece no parecerles lo mismo que dice tu voz, yo te observo y te siento pero no te entiendo, por primera vez la contradicción esta confundida.

y que tal si las letras tuvieran el tono de tu voz o el mio, ¿seria acaso mas fácil entender que no te entiendes? yo me siento vulnerable a la inclemencia de tus salvajes miedos, soy un trozo de luz que a nadie parece iluminar hoy, nada es para siempre, pero como gusta en mi la tonta ambición de que tu lo seas, a nadie le interesa tanto como a mi protegerte con un abrazo, derretir el hielo en el que encierras el eco de un no se que, que tu si sabes y que no me deja saber, los verbos y sus increíbles usos, las emociones y sus desmesuradas proporciones, adjetivos y sustantivos usados a conveniencia para que yo crea, a manera de cuento, que me es fácil buscarte, que vale la pena pensar que te puedo ayudar, que el tiempo que se me va acercándome a ti, lo invierto y no lo desperdicio, ni el dinero ni la música me son tan relativos como tu voz.

Y pasaré como otro que se callo al río, que lo arrastro y se ahogo, me dejaras salir así como así por que si, me aburre tanto pensar en ti como otra de las cosas que se van a ir de mi vida. No entiendo el sentido de partir, ni la ansiedad que esta me despierta, no me siento ni propio de mi mismo, y me aburre aun mas saber que soy tan efímero en la vida de cualquiera, como un periódico sobre una banca en un parque, yo no parezco entender racionalmente lo que tratas de explicar con tanta paciencia, no se de que hablas, pero hay que siento tu miedo, ay que siento mas el tono de tus palabras que el significado de las mismas... oye no he venido a asaltarte sino a ofrecerte ¿ sera que es tan malo, que vale mas si me alejo que si te lo entrego..?